Gabriela Salinas, residente de Ibagué, denunció públicamente a su exnovio, Leonardo Alfonso Calderón Ríos, por acoso, agresión psicológica y amenazas que se han extendido a su familia. La joven reveló que la relación, que duró año y medio, estuvo marcada por el maltrato y que la Fiscalía ya tiene conocimiento del caso para avanzar en la investigación.
Ibagué, 15 de octubre de 2025. La ciudad de Ibagué se ha conmocionado por la valiente denuncia pública realizada por Gabriela Salinas, una joven que decidió romper el silencio y exponer la violencia reiterada de la que, según su testimonio, ha sido víctima por parte de su exnovio, Leonardo Alfonso Calderón Ríos. El relato, compartido a través de redes sociales, ha generado una ola de indignación entre los ibaguereños, al visibilizar una grave situación de acoso y agresión.
Salinas relató que su única motivación al hacer pública la denuncia es lograr que Calderón Ríos la deje en paz y respete la decisión de terminar la relación, impidiendo cualquier tipo de contacto posterior. La joven aseguró que el acoso no se limita a la persecución, sino que incluye maltrato verbal y humillaciones que buscan infligirle un daño psicológico severo.
El nivel de acoso ha escalado peligrosamente, según la víctima, al involucrar a su círculo familiar más cercano. «Ha dicho cosas supremamente fuertes y se ha metido con mi vida privada», denunció Salinas, evidenciando que el sujeto ha utilizado un lenguaje «supremamente vulgar» y ha difundido rumores falsos sobre su vida íntima, lo que aumenta la presión y el daño moral.
Uno de los momentos más tensos, y que fue documentado en un video que ya circula en redes, ocurrió cuando Calderón Ríos llegó hasta la residencia de la joven, golpeando las puertas violentamente. «Se ha metido con mis abuelos, llegó a amenazar a mi abuelo con golpearlo», reveló Gabriela Salinas, mostrando cómo la situación ha trascendido el ámbito de la expareja.
La joven explicó que la relación, que se prolongó por cerca de un año y medio, estuvo caracterizada por un patrón de maltrato físico y psicológico constante. A pesar de haber vivido esta violencia, Salinas confesó que su principal motivo para no denunciar ante las autoridades anteriormente fue el miedo a las represalias o a una escalada de las agresiones por parte de su excompañero sentimental.
Sin embargo, las nuevas amenazas y la irrupción en el espacio de su familia la llevaron a tomar la difícil decisión de hacer pública la situación. Al presentar la denuncia, busca no solo protección, sino también utilizar el escrutinio social para presionar a que se tomen medidas efectivas contra el acosador.
Las autoridades han sido notificadas del caso. La Fiscalía General de la Nación ya tiene conocimiento de la denuncia de Gabriela Salinas y se encuentra avanzando en la investigación contra Leonardo Alfonso Calderón Ríos. Se espera que, con las pruebas aportadas por la víctima y los testimonios de su familia, se pueda emitir una orden que garantice la seguridad de la joven.
La denuncia de Salinas ha abierto un debate crucial en Ibagué sobre la violencia de género, el acoso a través de redes y la lentitud en la respuesta judicial, esperando que este caso sirva para que otras víctimas rompan el silencio y para que las autoridades actúen con la celeridad que estos casos de violencia intrafamiliar y acoso exigen.
